Días de clase
Rumor latente de voces distantes
perfiles de casas recortando el cielo.
Desde la ventana, paisajes de otoño,
alguna cigüeña planea a lo lejos
buscando su nido
bandadas de patos se alejan
decorando el cielo.
En clase, el ruido rompe el silencio
risa adolescente buscando su sitio.
Otro día más, otro curso más,
desfile constante de mentes inquietas
horas robadas al sueño,
sueños latiendo en las hojas
perennes, caducas,
página en blanco, futuro,
verbos que escriben la vida
que pasa entre letras.
Canto al verano
Acaba el verano:
las largas tardes de estío
la nitidez del cielo,
reflejos dorados en el ocaso
buscando el rayo verde al atardecer,
la lluvia de estrellas regresa a la tierra,
atrapa tus sueños
desaparece junto a la brisa del mar.
Días de sol y luna:
horas robadas al tedio
al canto monocorde del invierno
Invisible
Nubes grises cubren el cielo:
oscuridad.
Día plomizo de incertidumbre
mil decepciones toman las riendas del inconsciente.
Desaparecer,
ser invisible para soñar,
para vivir de una forma diferente
sin barreras ni miedos,
descubrir los reflejos dorados al atardecer
vivir dentro del halo de un cometa,
mirar atrás o hacia delante
despertar otra vez.
I can
(Para Mayte)
Aunque el camino sea duro
y sientas que no tienes fuerzas,
aunque haya obstáculos y piedras
a pesar de todos y de todo,
mírate al espejo y di:
soy capaz y puedo.
Soy capaz de lograr mis objetivos
soy capaz de amar, de hacer amigos
puedo sentir el viento en las mejillas
ver el azul del cielo,
conseguiré ser fuerte y ser yo misma
conseguiré llegar a mi destino.
Lograré conquistar todas las metas
vencer y ser valiente,
viviré con pasión cada momento
y volveré a soñar
porque soy capaz y puedo.
Ingravidez
Debe ser el aire que respiro
que me envuelve sutil en sus alas
debe ser el amor o el universo,
la ingravidez de estar entre tus brazos.
Será que somos sólo marionetas
que bailan al compás de los recuerdos,
de sueños enredados en momentos
que pasan o se quedan para siempre.
Quizá nada es real, solo el reflejo
de las cosas que pasan tras el tiempo.
Puede que sea así o me lo invento,
tal vez sólo es la vida…
debe ser.
Felicidad
El suave murmullo del viento en los sauces
susurra tu nombre,
amanece un nuevo día,
tu cálido abrazo me envuelve burlando al invierno.
Ha salido el sol
la vida retoma su ritmo cambiante.
Tras los cristales
miles de voces buscan su sitio
apresuradas, lejanas.
Abro los ojos:
el mundo cobra vida de repente
el trabajo, el estrés…
La felicidad
espera atrapada en ese momento
tan fugaz, tan volátil,
en el suave murmullo del viento en los sauces…
Fausto
¿Dónde vas tan risueño
desplegando tus falsos encantos?
No creas que eres fuerte
por tener el poder en tus manos,
no creas que el respeto
se hereda con el cargo.
No pienses que te quieren
si la gente se ríe a tu lado
no pienses que te admiran
si te dicen que tienes el mando.
Tan feliz en tu mundo imperfecto
rodeado de buenos lacayos
te crees que eres único
poderoso, estupendo, fantástico.
Esas manos que ahora te encumbran
que agradecen favores prestados
te hundirán en el lodo sin duda
simplemente cambiando de bando.
Como Fausto has vendido tu alma
por dinero y poder
como Fausto
arderás en las llamas.
Hielo y fuego
Algunas personas dejan huella
algunos momentos los sueñas eternos:
la inevitable calma que sigue a una tormenta
o la luz cegadora del sol en el desierto.
Sentimientos cruzados, cambiantes
sensaciones opuestas,
frialdad de hielo sobre fuego candente
tranquilidad y furia.
La vida…
va pasando entretanto.
In aeternis
El tiempo pasa para todos
inexorable
los amigos se alejan, los sueños siguen
imperturbables.
Caminos que se cruzan
tiempo y espacio
nada permanece, todo cambia.
Y en el camino de tus recuerdos
como la tinta que queda impresa
en el subconsciente
surge tu imagen difuminada:
alma y materia
viento y arena
ineludible
inquebrantable
eterna.
Cantos de sirenas
Tu voz se quiebra entre los muros
de tu jaula dorada
ya no eres la princesa del cuento
tras tu príncipe azul
nubes moradas salpican tu piel,
llora el silencio.
Duelen los golpes y las palabras
duele la ira de tu mirada,
cuesta ser fuerte, romper cadenas
cruzar la puerta de las tinieblas.
En la espiral del miedo
oyes el canto de las sirenas
mentiras dulces, falsas creencias
que te acorralan para que vuelvas.
El primer paso es sólo el principio
hora tras hora, día tras día
respira hondo, cruza el abismo
el mundo espera, brazos abiertos
camina, corre, persigue un sueño
siéntete libre
siéntete viva.